Una panacea utilizada por primera vez por muchos médicos en el siglo XIX, la solución de yodo de Lugol tiene una larga historia de uso en una amplia gama de tratamientos médicos. Desde ayudar en la producción de hormonas tiroideas hasta aumentar la función del sistema inmunológico a través de su efecto antibacteriano, los médicos a menudo han agregado gotas de yodo a sus tratamientos recetados. Algunos de los efectos de reponer las reservas de yodo pueden incluir la pérdida de peso.
Yodo dietético
Su cuerpo requiere un suministro continuo de yodo para mantener la función normal. Aunque puede encontrar yodo en la sal de mesa y los huevos yodados, es posible que estos no suministren suficiente para una salud óptima. El Dr. Guy Abrahams, investigador especializado en trastornos por deficiencia de yodo, explica cómo solo las algas contienen suficiente mineral para que pueda obtener un suministro suficiente solo a través de fuentes dietéticas.
Tiroides
Una de las funciones más importantes del yodo en el cuerpo humano implica sus efectos en la glándula tiroides. El Dr. David Brownstein, médico de familia y autor de "Yodo: por qué lo necesita", explica que el cuerpo necesita yodo para fabricar cantidades suficientes de tiroxina. Esta hormona, también conocida como T4, ayuda a regular su metabolismo y la tasa de quema de grasa en su cuerpo. Brownstein cree que el nivel de yodo en la dieta estadounidense estándar es insuficiente para la mayoría de las personas y puede causar una función tiroidea subóptima.
Sensibilidad celular
Muchas personas en la corriente principal médica creyeron durante mucho tiempo que el único propósito del yodo era ser un precursor de la hormona tiroidea tiroxina. Abrahams señala que la ciencia médica ahora reconoce una amplia variedad de roles para el mineral en el cuerpo, como el aumento de la sensibilidad celular en todo el cuerpo. Esto puede ayudar a revertir la resistencia a la insulina, un obstáculo común para quemar grasa.
Deficiencia de yodo
Brownstein utiliza una prueba de carga de yodo para evaluar si un paciente requiere más yodo. Con base en los resultados que él y otros médicos han informado al usar esta prueba, estima que existe una deficiencia de yodo en el 96 por ciento de la población. Estas personas pueden beneficiarse del uso de gotas de yodo.
Dosis
La dosis óptima para diferentes individuos puede variar, aunque Abrahams ha estudiado la ingesta dietética de muchas naciones y cree que la ingesta promedio de ciudadanos japoneses, calculada en 13.8 miligramos por día, representa una ingesta adecuada que protege contra los trastornos por deficiencia de yodo. Con esto en mente, sugiere dos gotas de solución de Lugol diariamente, lo que equivale a 12, 5 miligramos. Siempre hable con su médico antes de usar suplementos.