Una leyenda urbana argumenta que cualquier forma de entrenamiento de fuerza puede detener el crecimiento de una persona joven y, por lo tanto, debe evitarse hasta que los jóvenes estén completamente desarrollados. Si bien esto es en gran medida exagerado, el entrenamiento de fuerza en realidad puede ser muy saludable y útil para las personas que aún están creciendo, el estrés excesivo en el cuerpo causado por el levantamiento de pesas puede causar daños que conducen a un retraso en el crecimiento. Si todavía está creciendo, tome este riesgo en serio y evite hacerlo.
Paso 1
Habla con tu doctor. Es mejor que un profesional médico evalúe los posibles riesgos y beneficios del levantamiento de pesas para su cuerpo.
Paso 2
Aprenda la técnica de levantamiento adecuada. Muchas lesiones que pueden causar problemas de crecimiento ocurren cuando los levantamientos se realizan de manera inadecuada, aplicando presión a las placas de crecimiento, los huesos y otras estructuras no musculares en el cuerpo. Es posible que desee que un entrenador personal lo guíe a través de estos ascensores o vea un video instructivo antes de hacerlo.
Paso 3
Calentar y enfriar antes y después de levantar. Este puede ser un período rápido de ejercicio ligero de cinco a diez minutos diseñado para aumentar el flujo sanguíneo y preparar el cuerpo para el ejercicio. Esto también ayudará a evitar que ocurran lesiones.
Etapa 4
Realiza ejercicios de levantamiento ligero. Un conjunto de 12 a 15 repeticiones puede ser suficiente para las personas que aún están creciendo y en riesgo de retrasar su crecimiento. Los entrenamientos de levantamiento más intensos con conjuntos múltiples deben reservarse para las personas que ya han terminado de crecer.
Propina
Otras formas de entrenamiento de fuerza, como los ejercicios de masa corporal y los entrenamientos con tubos de resistencia, tienden a ser más seguros que el levantamiento de pesas.