https://img.livestrong.com/630x/photos.demandstudios.com/getty/article/176/50/538202665.jpg">
Paso 1
Vacíe las lentejas secas en un colador, escoja y deseche las lentejas de formas extrañas y los pedazos grandes de tierra y escombros, y luego enjuague los frijoles restantes con agua corriente fría.
Paso 2
Llena una cacerola con 1 1/2 tazas de agua por taza de lentejas. Lleve el agua a ebullición completa en su estufa.
Paso 3
Agregue las lentejas limpias al agua hirviendo y deje que se cocinen durante dos o tres minutos.
Etapa 4
Reduzca el fuego a medio y cocine a fuego lento, o cocine, las lentejas justo por debajo del punto de ebullición hasta que estén tiernas y crujientes. Para las lentejas verdes o marrones, esto tomará de 30 a 35 minutos; para lentejas rojas, unos 15 a 20 minutos.
Paso 5
Vacíe las lentejas en un colador para drenar el agua de cocción.
Paso 6
Extienda las lentejas cocidas en una sola capa sobre una bandeja para hornear. Use varias hojas si es necesario.
Paso 7
Coloque las bandejas para hornear en su congelador durante tres o cuatro horas, y luego transfiera las lentejas congeladas a bolsas de plástico de congelación de un cuarto de galón o recipientes a prueba de congelador.
Paso 8
Etiquete los envases con la fecha y una descripción del contenido, y colóquelos en el congelador.
Cosas que necesitarás
-
Colador
Cacerola
Bandejas para hornear
Contenedores congeladores
Propina
No cocines completamente las lentejas que planeas congelar. Una textura crujiente y tierna que ingresa al congelador asegurará que salga una textura crujiente y tierna.