La alimentación saludable es un componente clave para cualquier plan de ejercicio, especialmente cuando el objetivo es perder peso. Tomar días de descanso a ciertos intervalos durante la semana le da a su cuerpo la oportunidad de recuperarse mientras se fortalece. Pero una pérdida de peso exitosa significa continuar con su plan de alimentación incluso en los días en que no hace ejercicio. Una dieta equilibrada con una ingesta calórica adecuada es la clave del éxito a largo plazo.
Paso 1
Reduce los carbohidratos en los días de descanso. Los carbohidratos saludables le dan energía para lograr sus objetivos de ejercicio, pero en los días en que descansa, reducir los carbohidratos puede ayudarlo a mantener o continuar quemando calorías grasas para perder peso. Según Health.com, una dieta saludable de 2, 000 calorías contiene alrededor de 250 gramos de carbohidratos complejos cada día. Esto proporciona del 40 al 50 por ciento de la energía requerida para el ejercicio moderado durante las primeras etapas de un programa de acondicionamiento físico. Reducir ese número de 50 a 100 gramos en los días de descanso del ejercicio lo ayuda a alcanzar sus objetivos de acondicionamiento físico más rápido.
Paso 2
Concéntrese en las proteínas magras como el pescado, las aves y los huevos, que le proporcionan energía sostenida entre comidas y ayudan a reducir los picos de azúcar en la sangre. Obtener un poco de proteína magra con cada comida en tus días de descanso le da a tu cuerpo lo que necesita para reconstruir el músculo magro y recuperarse de la actividad extenuante. US News Health and Wellness recomienda comer proteínas en las tres comidas para ayudarlo a comer menos en general, especialmente en los días de descanso para hacer ejercicio. Comenzar el día con un desayuno rico en proteínas puede ayudarlo a comer hasta 200 calorías menos durante el día.
Paso 3
Aumente su consumo de productos nutritivos y legumbres. Los dietistas deportivos Bethanie Allanson y Benita Lalor para la Comisión Deportiva Australiana citan el importante papel que juegan las vitaminas y minerales de las frutas y verduras en la recuperación del ejercicio extenuante. Las verduras de hoja verde oscuro son ricas en hierro. Las frutas y verduras rojas y anaranjadas proporcionan betacaroteno y otros antioxidantes y reducen la inflamación. Los frijoles secos y las legumbres son una fuente de proteína baja en grasa con mucha fibra saludable para reducir el colesterol y mejorar la digestión.
Propina
Beba al menos seis u ocho vasos de agua en los días de ejercicio y de descanso.
Advertencia
Siempre consulte con su médico antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios o plan de alimentación.