Todos son conscientes de la importancia de la hidratación durante la actividad física extrema y los deportes para maximizar el rendimiento. Sin hidratación, los largos períodos de ejercicio y trabajo físico pueden provocar calambres musculares. Pero hay momentos en que la hidratación simple no es suficiente para suministrar las cantidades adecuadas de electrolitos que respaldan la función muscular normal. Como resultado, los atletas suelen beber agua salada para prevenir los calambres. El sodio regula el equilibrio de fluidos del cuerpo y apoya la función nerviosa y muscular.
https://img.livestrong.com/630x/photos.demandstudios.com/getty/article/115/116/495685847.jpg">
Paso 1
Mezcle el agua salada en una botella, jarra de agua o vejiga de hidratación. La clave para beber agua salada para prevenir los calambres es tener la fuente de agua conveniente para que pueda beber regularmente.
Paso 2
Agregue aproximadamente 1/4 a 1/2 cucharadita. sal por 32 oz. de agua. Disminuya la cantidad de sal para actividades recreativas y aumente la cantidad para actividades extremas o condiciones ambientales extremas como el calor o la humedad.
Paso 3
Agregue mezclas de bebidas deportivas o saborizantes de agua. El sabor agregado mejora la capacidad de bebida del agua, por lo que es más probable que beba durante la actividad física. Estas mezclas generalmente contienen nutrientes adicionales que ayudan a la sal a prevenir los calambres.
Etapa 4
Beba agua salada cada 20 a 30 minutos durante el ejercicio o la actividad física. Este consumo constante evita la deshidratación y los calambres.
Propina
La ingesta total de sodio debe ser de aproximadamente 10 a 25 g por día durante el entrenamiento.