Una vez que toma esa primera parte de la comida, va al estómago donde se descompone y se envía a través de su sistema digestivo, viajando a los intestinos delgado y grueso. Su cuerpo absorbe lo que necesita y elimina lo que no necesita a través de las heces. Su comida digerida necesita volumen para moverse a través de su sistema digestivo; aquí es donde entra la fibra. Incrementar gradualmente su consumo de fibra puede ayudar a estimular sus intestinos. Siempre hable con su médico acerca de aumentar su consumo de fibra para asegurarse de que no interferirá con ningún medicamento que esté tomando.
Tipos de fibra
La fibra dietética se divide en dos categorías: soluble e insoluble. La fibra soluble se encuentra en manzanas, cítricos, zanahorias y frijoles, y se disuelve para crear una pasta similar a un gel. Esta fibra ayuda a retrasar el proceso digestivo y a mantener el nivel de azúcar en la sangre a un nivel constante. La fibra insoluble afecta sus evacuaciones intestinales porque permanece sin cambios en su cuerpo, agregando volumen a sus heces. Los ejemplos de alimentos con fibra insoluble incluyen harina de trigo integral, nueces y muchas verduras, como la coliflor y los nabos.
La acción del peristaltismo
Su sistema digestivo mueve el material digerido a través de su cuerpo a través de un sistema conocido como peristaltismo, que es un movimiento ondulatorio. Si bien su sistema digestivo se involucra naturalmente en el peristaltismo, cuanto más volumen tenga su materia fecal, mejor y más rápido se moverá a través de su sistema. Las paredes de sus intestinos pueden empujar contra las heces y enviarlas en su camino, lo que le ayuda a mantener la regularidad digestiva. Si no obtiene suficiente fibra en su dieta o si a menudo experimenta estreñimiento, aumentar la fibra podría ayudar a estimular el peristaltismo.
Ingesta recomendada de fibra
Algo a considerar
Aumentar la ingesta de fibra puede acelerar la velocidad a la que las heces pasan por el tracto digestivo, pero debe tener precaución al aumentar su fibra. Agregar demasiado demasiado pronto puede sobrecargar el tracto digestivo, lo que hace que la fibra pase demasiado rápido y provoque gases, hinchazón y calambres. Aumente su consumo de fibra gradualmente, agregando una nueva porción cada semana hasta que alcance el consumo recomendado.
