Muchas personas se someten a cirugía de algún tipo durante sus vidas. Solo en 2007, se estima que se realizaron 45 millones de cirugías para pacientes hospitalizados en Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Ya sea que se someta a un procedimiento relativamente simple, como una cirugía dental, o un procedimiento más complejo, como una cirugía cardíaca, un descanso adecuado y una dieta saludable pueden ayudar a su cuerpo a sanar adecuadamente. Para obtener los mejores resultados, busque orientación específica de su médico o dietista.
Alimentos ricos en proteínas
La proteína proporciona aminoácidos, los componentes básicos del tejido magro. La recuperación posterior a la cirugía requiere aminoácidos para reparar y reconstruir su cuerpo, y los que se encuentran en el pescado, las claras de huevo y el pollo pueden ayudar a su cuerpo a sanar más rápido. Muchas fuentes animales de proteínas también contienen vitamina B12, que ayuda a su cuerpo a producir nuevas células sanguíneas. Los alimentos ricos en proteínas también mejoran la capacidad de su cuerpo para defenderse de infecciones y enfermedades que pueden dificultar su proceso de recuperación y, dado que tienen un impacto suave en el azúcar en la sangre, promueven niveles de energía mantenidos entre comidas. Las fuentes adicionales de aminoácidos incluyen pavo, carnes magras, productos lácteos bajos en grasa y legumbres, como frijoles, guisantes y lentejas.
Alimentos ricos en vitamina C
La vitamina C es una vitamina soluble en agua que se encuentra en una variedad de alimentos saludables que proporciona beneficios antioxidantes potentes o para combatir enfermedades. La vitamina C también ayuda a proteger sus células de las sustancias tóxicas conocidas como radicales libres y es necesaria para la curación de heridas, según la Oficina de Suplementos Dietéticos. Incorpore una variedad de alimentos ricos en vitamina C, como pimientos rojos, cítricos y jugos, bayas, kiwi, mangos, papaya, melón, verduras de hoja verde, brócoli, coles de Bruselas, tomates, batatas y papas al horno, regularmente. Los cereales fortificados, los batidos y los jugos de frutas mezclados también son fuentes ricas en vitamina C.
Granos enteros
Los carbohidratos proporcionan glucosa, la principal fuente de energía de su cuerpo. Los carbohidratos complejos, como los granos integrales, también proporcionan cantidades ricas de nutrientes, que apoyan el sistema inmunológico de su cuerpo y fibra, que pueden ayudar a prevenir o aliviar el estreñimiento mientras se recupera de la cirugía. El Centro de Investigación del Cáncer Pancreático Sol Goldman recomienda enfatizar los carbohidratos complejos sobre los carbohidratos refinados, como el azúcar, que pueden amortiguar sus niveles de energía y contribuir a la fatiga durante el proceso de curación. Los ejemplos de alimentos integrales nutritivos incluyen panes integrales 100 por ciento, arroz integral de grano largo, arroz salvaje, sopa de cebada, avena a la antigua y palomitas de maíz.
Alimentos ricos en hierro
El consumo de alimentos ricos en hierro como el hígado, las almejas y la carne de res es importante para optimizar su contenido de hemoglobina y aumentar sus reservas de hierro antes de la cirugía para tener en cuenta la pérdida de sangre durante el procedimiento. La hemoglobina es la proteína en los glóbulos rojos que transporta oxígeno a los tejidos, y este oxígeno es esencial para el metabolismo celular y la curación después de la cirugía. Un estudio publicado en "Transfusion Medicine" mostró que las personas que recibieron un suplemento de hierro antes de la cirugía tuvieron un recuento de hemoglobina más alto una semana después de la cirugía que el grupo que no tomó un suplemento. Sin embargo, consulte con su profesional de la salud antes de agregar un suplemento de hierro a su dieta previa a la cirugía.