Una hernia de disco es una condición en la cual un disco entre las vértebras en la columna se rompe y comprime un nervio espinal. También se le conoce comúnmente como un disco resbalado o roto. Esto puede causar dolor, entumecimiento y hormigueo en la espalda o las piernas, dependiendo de la ubicación de la hernia. Los discos herniados se tratan inicialmente con reposo, relajantes musculares, medicamentos antiinflamatorios no esteroideos y fisioterapia. Afortunadamente, la mayoría de las personas pueden recuperarse solo con estas medidas conservadoras.
Beneficios del ejercicio
Los ejercicios de estiramiento y fortalecimiento son un componente integral de la recuperación de una hernia de disco. Los ejercicios de estiramiento ayudan a aliviar el dolor y evitan que los músculos de la espalda se pongan rígidos. Los ejercicios de fortalecimiento se realizan para desarrollar los músculos de la espalda, lo que a su vez estabiliza la columna vertebral, empuja el disco hacia su lugar y evita que el disco se hernia en el futuro.
Ejercicios de estiramiento
Antes de comenzar a hacer ejercicio, calienta durante varios minutos para aflojar los músculos. Los ejercicios aeróbicos suaves y de bajo impacto como caminar o nadar son los mejores para minimizar el dolor y disminuir el riesgo de una nueva lesión. Después de que se haya calentado adecuadamente, puede avanzar para estirar la espalda. Algunos de estos estiramientos pueden incluir la extensión de la espalda de pie, flexiones de espalda propensas, "superhombre", flexión de rodillas hacia atrás, rodilla propensa al pecho, isquiotibiales y estiramiento de los músculos supina.
Ejercicios de fortalecimiento
Los ejercicios de fortalecimiento deben realizarse después de completar sus estiramientos. Estos pueden incluir el giro de rodilla propenso, elevación de pierna recta, flexión lateral de pie, círculo de brazo, rotación lumbar de pie y contracción abdominal.
Periodo de tiempo
Más del 95 por ciento de los pacientes se recuperan en seis semanas, según la Clínica Mayfield y el Instituto de la columna vertebral. Si aún experimenta entumecimiento, hormigueo o dolor después de seis semanas de tratamiento conservador, comuníquese con su médico. Es posible que necesite una cirugía para reparar el disco.
Consideraciones
Consulte a su médico antes de comenzar cualquier rutina de ejercicios. Si bien estos ejercicios se pueden hacer en casa, se realizan mejor bajo la guía de un fisioterapeuta. Un fisioterapeuta podrá diseñar una rutina de ejercicio específica para su afección, así como realizar masajes, ultrasonidos, tracción y estimulación muscular eléctrica para facilitar aún más la recuperación.
Advertencia
Consulte a su médico de inmediato si tiene incontinencia intestinal o vesical; retención de intestino o vejiga; entumecimiento u hormigueo en las nalgas, dentro de los muslos o entre las piernas; debilidad de las piernas; o dificultad para caminar. Estos son signos de una afección grave llamada síndrome de la cola de caballo, que es una emergencia médica que requiere cirugía inmediata. La cola de caballo puede ser causada por una hernia de disco de la columna distal que comprime la raíz del nervio de cola de caballo.
Prevención
Varias medidas simples pueden ayudar a prevenir una hernia de disco. Una es perder peso si tiene sobrepeso. Cuanto más peso cargue alrededor de su abdomen, mayor será la presión sobre su espalda y discos, y mayor será el riesgo de desarrollar una hernia de disco. Otra medida clave es dejar de fumar, ya que este es un factor de riesgo para la enfermedad degenerativa del disco. Además, aprenda la postura correcta y las técnicas de elevación. Levantar desde la espalda en lugar de las piernas puede ejercer una presión excesiva sobre los discos y los músculos de la espalda. Del mismo modo, una postura incorrecta puede debilitar los discos. Finalmente, haga ejercicios de fortalecimiento abdominal y de la espalda regularmente para ayudar a estabilizar su columna vertebral.