La nicotina puede causar muchos problemas de salud. Puede aumentar temporalmente la presión arterial y la frecuencia cardíaca porque hace que los vasos sanguíneos se estrechen. La nicotina también puede hacer que la sangre sea más propensa a coagularse y bloquear una arteria, y puede causar daño a los pulmones y dificultar la respiración. La nicotina en el cuerpo primero es procesada por el hígado y luego excretada por los riñones. Con el tiempo, la nicotina puede tener efectos negativos en los riñones.
Proteinuria
Si bien el vínculo exacto entre la nicotina y la enfermedad renal aún no se conoce bien, los que usan nicotina parecen tener un mayor riesgo de proteinuria, explica la Asociación Estadounidense de Pacientes Renales. La proteinuria es una afección en la que hay una cantidad anormal de proteínas en la orina.
Cuando los riñones funcionan correctamente, filtran los productos de desecho y dejan sustancias importantes como proteínas en la sangre, para que estén disponibles para el cuerpo. Si los riñones se dañan, la proteína puede filtrarse a la orina y excretarse del cuerpo. Esto puede provocar edema o hinchazón en varias áreas del cuerpo, y es una señal de que los riñones pueden estar fallando.
Nefropatía diabética
Fumar también se ha relacionado con una progresión más rápida de la nefropatía diabética, afirma el "Journal of the American Medical Association". La nefropatía diabética se diagnostica cuando los niveles altos de azúcar en la sangre no controlados dañan las estructuras en los riñones llamadas nefronas, que ayudan a filtrar los productos de desecho. El nivel alto de azúcar en la sangre puede hacer que estas estructuras cicatricen y se vuelvan más gruesas de lo normal. Aunque dejar de fumar no puede revertir el daño que ya se ha hecho, puede ayudar a retrasar la progresión de esta afección.
Falla renal cronica
Fumar puede provocar nefrosclerosis, que es un daño a las pequeñas arterias que irrigan los riñones. La nicotina también puede contribuir a la glomerulonefritis, que se diagnostica cuando hay daño en los glomérulos o estructuras dentro del riñón que ayudan a filtrar los productos de desecho. Ambas condiciones pueden conducir a insuficiencia renal crónica, advierte un informe de 2004 en el "Journal of the American Society of Nephrology".
La enfermedad renal puede no producir ningún síntoma hasta que esté en las etapas avanzadas, explica la National Kidney Foundation. Por lo tanto, es importante que las personas con mayor riesgo, como los fumadores, sean examinadas mediante análisis de sangre.