En personas sanas, generalmente no se sabe que la vitamina D cause calambres y diarrea cuando se toma a las dosis recomendadas por el médico y como agente único. Sin embargo, cantidades excesivas de vitamina D pueden provocar toxicidad y síntomas relacionados, algunos de los cuales son gastrointestinales.
Síntomas relacionados con el suplemento
Muchos tipos de suplementos de vitamina D también pueden incluir calcio, magnesio y zinc. Las altas dosis de magnesio de los suplementos dietéticos a menudo provocan diarrea que puede ir acompañada de náuseas y calambres abdominales. Dosis excesivas de vitamina D, solas, pueden provocar toxicidad, con una larga lista de síntomas potenciales que incluyen diarrea y estreñimiento. En adultos, tomar 50, 000 unidades internacionales de vitamina D al día durante varias semanas conduce a la toxicidad.
Otras conexiones
Los productos lácteos pueden causar calambres y diarrea si tiene intolerancia a la lactosa y está usando productos lácteos para complementar sus niveles de vitamina D. Si le diagnosticaron deficiencia de vitamina D, es posible que la razón de su deficiencia también esté causando calambres y diarrea. Por ejemplo, la enfermedad inflamatoria intestinal causa deficiencia de vitamina D, pero los síntomas principales también son calambres y diarrea. Puede ser que se necesite más investigación para buscar una causa de la deficiencia de vitamina D, y esto también puede resolver los calambres y la diarrea.
Posibles peligros
Consulte con su médico antes de tomar suplementos, ya que son posibles las interacciones con medicamentos comúnmente recetados. Además de la diarrea y el estreñimiento, los síntomas de toxicidad aguda por vitamina D pueden incluir confusión, necesidad frecuente de orinar, sed, falta de apetito, vómitos y debilidad muscular.
Busque atención médica urgente para calambres y diarrea acompañada de dolor abdominal o rectal intenso, sangre en las heces, heces negras, alquitranadas o fiebre. También esté atento a signos de deshidratación, como disminución de la producción de orina, mareos o aturdimiento, sed, dolor de cabeza y boca seca y pegajosa.