El chile verde es un alimento básico de las dietas indias y sudamericanas. El chile es el fruto de las plantas con flores Capsicum annuum y C. frutescens. El chile verde se usa principalmente como especia en los alimentos, aunque está incluido en algunos medicamentos. Produce un aceite viscoso, afilado y picante, y también puede servir como condimento. El chile también se puede moler en polvo para usar con fines similares.
Vitamina a
El nutriente más abundante en el chile verde es la vitamina A, según la Base de datos nacional de nutrientes del Departamento de Agricultura de los EE. UU. La vitamina es un carotenoide, también conocido como retinol, asociado con el antioxidante betacaroteno. Según Medline Plus, la vitamina A es esencial para la salud y el mantenimiento de los huesos, dientes, membranas mucosas, ojos y piel. La vitamina es esencial para la salud de los ojos, ya que produce pigmentación de la retina y promueve la visión nocturna. Las deficiencias de vitamina A resultan en visión e inmunidad debilitadas.
Vitamina C
La vitamina C, o ácido ascórbico, es el segundo nutriente más abundante en el chile verde. Actúa como antioxidante y vitamina, dice Medline Plus. Es esencial para la formación de colágeno, tejido cicatricial, ligamentos, vasos sanguíneos y tendones. También ayuda al cuerpo a mantener y reparar heridas, huesos, dientes y cartílagos. Como antioxidante, fortalece la salud general y ayuda al cuerpo a combatir infecciones.
Fibra dietética
El chile verde tiene una gran cantidad de fibra dietética: 2 cucharaditas de chile seco en polvo contienen el 10 por ciento del valor diario de fibra recomendado por la Administración de Alimentos y Medicamentos. La fibra dietética no es digerible y pasa a través del sistema digestivo, eliminando los desechos. También contribuye en gran medida a la saciedad. La fibra puede prevenir el estreñimiento y ayudar a mantener un peso saludable, así como promover la salud digestiva, particularmente en los intestinos.
Capsaicina
La capsaicina es una sustancia que ocurre naturalmente en los chiles, dándoles su sabor picante. Cuanto más picante sea el chile, más capsaicina contiene. La capsaicina inhibe eficazmente los neuropéptidos que causan inflamación, reduciendo así la inflamación cuando se ingiere. Existe evidencia clínica de que la capsaicina también puede tratar trastornos relacionados con los nervios, como dolor persistente, psoriasis y neuropatía. Además, la capsaicina actúa como un analgésico natural que es lo suficientemente potente como para ayudar a tratar afecciones como la osteoartritis.