La cafeína en cualquier forma, incluido el café, no se recomienda para niños menores de 12 años, según el sitio web del Sistema de Salud de UCLA, pero el café no es perjudicial para los adolescentes si se consume con moderación. Las personas beben café por sus efectos físicos, así como por el aspecto social, y los adolescentes también pueden beneficiarse de disfrutar de un café responsable.
Efectos físicos
Los adolescentes viven vidas ocupadas, haciendo malabarismos con su vida social con tareas escolares, deportes y otras actividades. Muchos no duermen lo suficiente para sentirse renovados por la mañana. Según Sleep Foundation, solo el 15 por ciento de los adolescentes duermen más de ocho horas en las noches escolares. La cafeína en el café actúa como un estimulante suave, despertando a las personas que la beben y perfeccionando su estado de alerta mental. Los adolescentes pueden beneficiarse de tomar café antes de la escuela si necesitan un estimulante suave para ayudarlos a mantenerse despiertos y concentrarse en su trabajo escolar u otra actividad. El café solo debe usarse ocasionalmente para este propósito, ya que los adolescentes deben practicar hábitos de sueño saludables, que incluyen dormir ocho horas por noche.
Beneficios sociales
Beber café es una actividad social, y las cafeterías suelen ser centros de actividad para adolescentes y adultos jóvenes. El café es una bebida saludable con moderación, aunque los brebajes elaborados a base de café pueden contener una gran cantidad de azúcar, grasas y calorías. Los adolescentes pueden beneficiarse de socializar con sus amigos mientras toman café, lo cual es más saludable que consumir bebidas energéticas de alto poder o tomar bebidas ilegales como el alcohol.
Consideraciones
Los adolescentes deben limitar su consumo de café para que no consuman más de 100 mg de cafeína por día, o una taza de café preparado, recomienda el sitio web de TeensHealth. Beber más de esa cantidad pone a los jóvenes en riesgo de adicción a la cafeína. Los adolescentes que disfrutan de los beneficios sociales del consumo de café pueden cambiar a versiones descafeinadas de sus bebidas favoritas para mantener su consumo a un nivel saludable.
Advertencia
Los adolescentes que toman café por sus beneficios físicos y mentales pueden inadvertidamente consumir demasiada cafeína al tomar otras bebidas con cafeína o al usar otros productos que contienen el medicamento. Por ejemplo, los refrescos a base de cola son fuentes comunes de cafeína para los jóvenes, al igual que las bebidas energéticas e incluso el té helado. Los fabricantes de medicamentos para el dolor y el resfriado a menudo mejoran sus medicamentos de venta libre con cafeína. Los adolescentes deben estar atentos al monitoreo del consumo general de cafeína, no solo al consumo de café.
Retirada
La abstinencia de cafeína es desagradable, ya que los adolescentes que sin darse cuenta se vuelven adictos a la sustancia al beber demasiado café u otras fuentes tendrán síntomas físicos si interrumpen bruscamente su consumo de la sustancia química. Los dolores de cabeza, el malestar estomacal y la irritabilidad alcanzarán su punto máximo en dos días y desaparecerán por completo en poco más de una semana. La mayoría de los adolescentes que se quedan por debajo de los 100 mg por día de consumo de cafeína no se vuelven adictos.