Un temblor, o temblor incontrolable, que puede desencadenarse por el consumo de alcohol, se caracteriza por movimientos agitados y espasmódicos de manos y dedos, y no puede detenerse voluntariamente. Los temblores también pueden ocurrir en los brazos, la cabeza y los ojos, y pueden afectar su voz. Las personas que experimentan temblores asociados con el alcohol pueden tener un problema grave y deben hablar con su médico sobre las opciones de tratamiento.
Temblores y alcohol
El consumo de alcohol, el alcoholismo y la abstinencia de alcohol se encuentran entre las principales causas de los temblores. Su médico le preguntará si beber empeora o mejora sus temblores, como un medio para tratar de determinar si el alcohol es el culpable de los movimientos involuntarios. Dejar de beber abruptamente después de un período prolongado de tiempo, como dejar de consumir alcohol la mayoría de los días de la semana durante varios años, es potencialmente peligroso y puede provocar depresión, vómitos, diarrea e incluso convulsiones o la muerte; por lo tanto, no debe renunciar sin orientación profesional.
Abstinencia de alcohol
Tratamiento
En 2004, "American Family Physician" informó que "la mayoría de los pacientes sometidos a abstinencia de alcohol pueden ser tratados de manera segura y efectiva como pacientes ambulatorios". La desintoxicación involucra medicamentos que calman los nervios y reducen la agitación, previenen las convulsiones, mantienen la presión arterial y la frecuencia cardíaca y reducen los antojos de alcohol. Desintoxicar su sistema del alcohol puede tomar de siete a 10 días.
Prevención
Si bebe mucho, controlar su consumo de alcohol puede prevenir la aparición de temblores. Sin embargo, una vez que tenga síntomas como temblores, es probable que su cuerpo ya dependa del alcohol. El "New York Times" informa que el consumo excesivo de alcohol se caracteriza por consumir más de 15 bebidas por semana para hombres y ocho bebidas por semana para mujeres. Beber más de cinco bebidas al día para los hombres y más de cuatro al día para las mujeres también se considera excesivo. Una señal de que depende de beber puede ser una rutina diaria que se ve afectada u organizada en torno a su consumo habitual de alcohol; por ejemplo, tardanzas constantes en el trabajo debido a las resacas. Pelear con su cónyuge, ser arrestado por beber y conducir, y no recordar cosas que dijo y hizo mientras bebía también es indicativo de dependencia del alcohol.