Para cosechar los efectos a largo plazo del ejercicio en los huesos, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de los EE. UU. Recomienda que los adultos realicen al menos 150 a 300 minutos de ejercicio de intensidad moderada y al menos dos días de ejercicios de fortalecimiento muscular de todos los músculos principales grupos Los beneficios del ejercicio en el sistema esquelético incluyen una mayor densidad ósea, una mejor movilidad articular y una mayor circulación de líquido sinovial.
Propina
Los efectos a corto plazo del ejercicio sobre el sistema esquelético incluyen el inicio de la remodelación y fortalecimiento óseo. Con el tiempo, la fuerza y la densidad ósea aumentan, la circulación de la sangre y el líquido sinovial mejora, y su fuerza y rango de movimiento aumentan.
Mejora la densidad ósea
A medida que el cuerpo envejece, la densidad ósea disminuye naturalmente. En casos severos, conduce a osteoporosis, lo que resulta en un aumento de fracturas y caídas por debilidad. El ejercicio aumenta la fuerza ósea y la densidad mineral.
El ejercicio ayuda a mitigar el proceso de degeneración ósea y provoca la remodelación de los huesos, un proceso que repara pequeños daños y fortalece los huesos para adaptarse a las demandas del ejercicio. La remodelación se produce como resultado de la tensión en el hueso por la contracción muscular y el impacto durante los ejercicios de carga de peso, como correr, subir escaleras y saltar la cuerda.
Rango de movimiento en las articulaciones
Las articulaciones conectan los huesos del cuerpo y consisten en tejidos como el cartílago, los ligamentos y el menisco. El ejercicio regular también mejora la salud y la movilidad de las articulaciones, mientras que un estilo de vida sedentario puede provocar degeneración y rigidez en las articulaciones.
El cartílago debe estar estresado por el ejercicio y el movimiento para permanecer funcional, según un artículo publicado en 2017 por Clinical Calcium . Además, el ejercicio aumenta la circulación sanguínea y de líquido sinovial en las articulaciones. El líquido sinovial es la sustancia que lubrica sus articulaciones. Esto ayuda no solo a las articulaciones sanas, sino que también puede ayudar a aliviar el dolor y agregar estabilidad a las articulaciones con osteoartritis.
Fuerza muscular y soporte
Los músculos son un componente importante del sistema musculoesquelético. Además de los beneficios para sus huesos y articulaciones, el ejercicio aumenta su fuerza muscular, resistencia y flexibilidad. Todos estos componentes le permiten realizar tareas más fácilmente y disminuir el riesgo de lesiones y caídas. Los músculos fuertes también ayudan a apoyar y proteger sus articulaciones, disminuyendo el riesgo de lesiones, dice Harvard Health Publishing.
Riesgos de ejercicio y consideraciones
El ejercicio ofrece muchos beneficios, pero también conlleva el riesgo de daños y lesiones. Evite las lesiones realizando todos los ejercicios con la forma correcta para evitar torcer una articulación o tirar de un músculo.
No levante pesas que sean demasiado pesadas para su nivel de condición física, y aumente la intensidad de sus entrenamientos lentamente con el tiempo para permitir que su cuerpo se adapte y se fortalezca sin lesiones. Si es necesario, realice versiones modificadas de ejercicios para aumentar su fuerza y proteger sus articulaciones. Por ejemplo, si aún no puede hacer una flexión regular, intente una flexión de pared o una flexión de rodilla.
Escucha a tu cuerpo. Si siente dolor, interrumpa el ejercicio y consulte a su médico. En algunos casos, las articulaciones y los tendones pueden dañarse por el uso excesivo de realizar demasiado ejercicio. Cambia tu rutina y realiza una variedad de ejercicios. Apoye su cuerpo durante el ejercicio manteniendo una dieta saludable y manteniéndose hidratado.
Advertencia
Consulte a su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios.