La creatinina es un producto de desecho del metabolismo muscular. Cuando los músculos trabajan, descomponen las proteínas, incluido el aminoácido creatina, para producir energía. La mayoría de la creatina se consume, pero alrededor del 2 por ciento ingresa al torrente sanguíneo como creatinina. Los riñones eliminan la mayor parte de la creatinina. Los niveles de creatinina pueden verse afectados por la edad, el sexo, la raza, la dieta, la masa muscular, algunos medicamentos y enfermedades crónicas, como el hipertiroidismo, el hipotiroidismo, la diabetes y la enfermedad renal. El rango normal de creatinina en el suero sanguíneo es de 0, 75 a 1, 3 mg / dL para los hombres y de 0, 6 a 1, 1 mg / dL para las mujeres. Los valores normales pueden variar ligeramente según el laboratorio y la técnica utilizada.
Síntomas
Un alto nivel de creatinina no es una causa directa de los síntomas, y alguien con niveles superiores a lo normal puede no notar ningún cambio. Los síntomas asociados con un alto nivel de creatinina suelen ser causados por una enfermedad subyacente que afecta la función renal. La causa más frecuente es la enfermedad renal en sí. Los síntomas de la enfermedad renal pueden incluir fatiga, dolores de cabeza, pérdida de apetito, náuseas o vómitos, pérdida de peso, picazón en la piel, hinchazón en manos y pies, micción frecuente o dolorosa o un cambio en el color de la orina.
La diabetes y la presión arterial alta también se asocian con insuficiencia renal. Otros síntomas pueden indicar destrucción muscular, hipotiroidismo o cetoacidosis diabética como la causa de la creatinina elevada. Un nivel alto de creatinina no significa necesariamente que la persona tenga una enfermedad renal crónica, pero indica la necesidad de otras pruebas.