El sangrado rectal se refiere al sangrado de la parte inferior del colon o del recto, que son las últimas pulgadas del colon. Puede notarlo como cintas de sangre roja mezcladas con sus heces, sangre en papel higiénico o agua de color rosa en el inodoro después de defecar. Los suplementos de hierro pueden contribuir al sangrado rectal. Si experimenta sangrado rectal, deje de tomar suplementos de hierro y llame a su médico de inmediato.
Causas
Las causas de sangrado rectal incluyen cáncer anal o colorrectal o pólipos, fisuras anales, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, enfermedad celíaca, diverticulosis, colitis isquémica, colitis inducida por radiación, infecciones, lesiones por coito anal, diarrea severa, hemorroides y estreñimiento. Los suplementos de hierro pueden causar sangrado rectal indirectamente al desencadenar estreñimiento o diarrea. Los suplementos de hierro también contribuyen al sangrado rectal relacionado con otras afecciones al empeorar la inflamación o el daño tisular causado por esas afecciones.
Diagnóstico
Su médico puede diagnosticar la causa del sangrado rectal en función de sus antecedentes y hallazgos físicos. Si ha estado tomando suplementos de hierro, incluso si un médico no los recetó, asegúrese de incluir la dosis y la frecuencia en su historial. En la mayoría de los casos, su médico ordenará análisis de sangre para determinar la duración y la gravedad del sangrado rectal y programar una colonoscopia para inspeccionar el recto y el colon directamente.
Tratamiento
El tratamiento para el sangrado rectal depende de su causa. Si su médico lo diagnostica de manera concluyente como estreñimiento debido a suplementos de hierro, probablemente le recomendará que deje de tomar los suplementos o que tome un tipo o dosis diferente. El sangrado rectal puede causar deficiencia de hierro. Si la causa subyacente de su sangrado rectal no se puede tratar, su médico puede recomendarle que tome inyecciones intramusculares o intravenosas de hierro porque, a diferencia de los suplementos orales de hierro, no causan problemas gastrointestinales.
Prevención
Consumir una dieta que contenga hierro adecuado puede eliminar su necesidad de suplementos de hierro. Buenas fuentes de hierro incluyen cortes magros de carne roja, pollo, pescado, yemas de huevo y legumbres. La combinación de estos alimentos con frutas y verduras ricas en vitamina C, como los cítricos, el brócoli, los tomates, las fresas, los pimientos y las papas, aumenta su capacidad de absorber el hierro. Si su médico aún le recomienda que tome suplementos de hierro, siga cuidadosamente sus instrucciones sobre la dosis, el momento y el tipo de hierro que debe tomar.
Consideraciones
No tome suplementos de hierro a menos que su médico le indique que lo haga. Además del sangrado rectal, pueden producirse otros efectos secundarios como malestar estomacal, dolor abdominal, náuseas y vómitos con suplementos de hierro. El uso crónico de suplementos de hierro innecesarios puede conducir a una afección llamada sobrecarga de hierro. La sobrecarga de hierro se caracteriza por insuficiencia orgánica y artritis relacionada con la deposición de hierro en el corazón, el hígado, el páncreas, el cerebro o las articulaciones. Si toma suplementos de hierro, informe siempre a sus proveedores de atención médica. Los suplementos de hierro pueden causar un falso positivo en algunas pruebas de sangrado gastrointestinal.
