Los estadounidenses obtienen más que suficientes proteínas al comer una dieta variada, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. La mayoría de los adultos necesitan entre 46 y 56 gramos de proteína al día, aunque algunos pueden requerir más debido a condiciones crónicas de salud, cirugía para bajar de peso, nivel de condición física u otros factores.
Los polvos fabricados comercialmente proporcionan una fuente conveniente de proteínas cuando se mezclan como un batido, pero solo los pacientes con supervisión médica deben usarlos como sustitutos de todas las comidas, ya que carecen de fibra y otros nutrientes, según la Clínica Mayo.
Paso 1: siga las instrucciones
Lea la etiqueta en su elección de proteína en polvo para determinar la cantidad de cucharadas que necesitará por porción. Algunos recomiendan una cucharada, mientras que otros recomiendan dos cucharadas.
Paso 2: elige una base y un método de mezcla
Seleccione el líquido apropiado para su gusto, así como sus necesidades dietéticas. Considere el sabor de la proteína en polvo, la consistencia y temperatura deseadas y si necesita o no limitar su consumo de calorías o carbohidratos.
Aunque las etiquetas de los fabricantes recomiendan agua, otras opciones posibles incluyen leche de cualquier tipo (leche de vaca, leche de almendras o leche de anacardo), jugo, café, té, limonada, pudín o yogur.
Elige tu equipo de mezcla. Los batidos simples se mezclan bien con una cuchara, tenedor o vaso mezclador. Sin embargo, si planeas agregar fruta, hielo u otros ingredientes, necesitarás una licuadora.
Paso 3: mide y agrega la mitad
Mida el líquido en un vaso, tazón, vaso mezclador o licuadora. Siga las instrucciones en la etiqueta de la proteína en polvo, generalmente de seis a ocho onzas por porción, o ajuste la cantidad si prefiere un batido más o menos espeso.
Agregue la mitad de la cantidad adecuada de proteína en polvo al recipiente si su líquido está frío o a temperatura ambiente. Para mezclar con café caliente, té o sopa, vierta una pequeña cantidad de agua tibia en un vaso separado para hacer una pasta antes de agregarla al líquido.
Paso 4: Agite o revuelva
Revuelva rápidamente con un tenedor o cuchara durante unos segundos o, si usa un recipiente agitador, cierre la parte superior y agite enérgicamente. Si usa una licuadora, use la configuración de mezcla durante unos segundos.
Permita que la mezcla descanse por un minuto, luego agregue la proteína en polvo restante al recipiente. Revuelva, mezcle o agite hasta que todos los grumos hayan desaparecido. Algunas proteínas en polvo se disuelven más fácilmente que otras, así que continúe mezclándose hasta que el batido esté suave.
Alternativamente, puede verter líquidos calientes en la pasta de proteína en polvo a temperatura ambiente y remover con una cuchara o agregar cubitos de hielo o fruta a la licuadora para obtener un batido de proteínas.