Los sistemas de su cuerpo son distintos e interactivos y siempre trabajan para mantener la homeostasis o el equilibrio. Para contribuir al equilibrio físico general que sustenta la vida, cada sistema debe satisfacer sus necesidades metabólicas a través de la nutrición que obtiene de los alimentos. Las proteínas, los carbohidratos y las grasas de la dieta suministran energía calórica y elementos como los aminoácidos que se utilizan para formar las células. Los compuestos en los minerales y vitaminas de la dieta pueden actuar como hormonas o catalizadores en las reacciones necesarias para las funciones corporales, como la regulación de la presión arterial.
Proteína
Los alimentos proporcionan dos tipos de proteínas: la proteína completa proporciona los ocho aminoácidos esenciales, mientras que la proteína incompleta proporciona algunos, pero no todos. Los alimentos de origen animal que contienen proteínas completas incluyen carne de res, cerdo, cordero, pollo y pavo y sus productos, como la leche y los huevos. Los alimentos de origen vegetal con proteínas incompletas proporcionan varias combinaciones de aminoácidos. Comer una variedad de todos los tipos de alimentos con proteínas le proporcionará todos los aminoácidos que ayudan a su cuerpo a lograr la homeostasis.
Carbohidratos
Su cuerpo digiere almidón y carbohidratos de azúcar para usarlos como energía para alimentar tareas metabólicas, como la respiración y la circulación sanguínea. Los carbohidratos de fibra no se digieren y no se consideran esenciales para la homeostasis, aunque sí benefician la salud digestiva y cardiovascular. Los granos, como el trigo, la avena, el arroz y el maíz, y las verduras, como los frijoles y los guisantes, contienen carbohidratos de almidón. Las manzanas y otras frutas, zanahorias y otras verduras y leche y otros productos lácteos contienen carbohidratos de azúcar naturales.
Ácidos grasos
Los ácidos grasos saturados, monoinsaturados y poliinsaturados, o grasas, se encuentran en todo tipo de alimentos. Su cuerpo necesita ciertas cantidades de cada tipo para funciones que promueven la homeostasis, como el aislamiento corporal y la coagulación de la sangre. Las grasas saturadas son abundantes en alimentos de origen animal, como carnes, pescados y productos lácteos. El aceite de oliva tiene mayores proporciones de grasa monoinsaturada, mientras que las nueces, como las nueces, y las semillas, como las semillas de girasol, tienen una gran cantidad de grasa poliinsaturada.
Minerales y vitaminas
Su cuerpo necesita cantidades significativas de macrominerales de calcio, potasio, magnesio, cloruro y fósforo, y pequeñas cantidades de minerales, hierro, cobre, zinc, yodo, fluoruro y selenio para completar sus procesos metabólicos. Trece vitaminas se consideran esenciales porque su cuerpo no produce suficiente o ninguna, incluidas A, C, D, E, K y el grupo de vitaminas B: tiamina, riboflavina, niacina, B-6, ácido fólico, B-12, pantoténico. ácido y biotina. Una dieta equilibrada de varias frutas, verduras, granos, nueces, semillas, frijoles, carnes, pescado y productos lácteos proporcionará minerales y vitaminas adecuadas.