Cuando tienes prisa o no tienes ganas de cocinar, la comida rápida a menudo se convierte en una opción para casi cualquier comida. Si bien no todas las cadenas de comida rápida o elementos de menú no son saludables, los restaurantes de comida rápida son conocidos por ofrecer no solo porciones más grandes que las saludables, sino también alimentos que están repletos de grasas saturadas, sodio y calorías. Al eliminar, o al menos limitar, su consumo de opciones poco saludables de comidas rápidas como hamburguesas, papas fritas y pizzas, comenzará a ver y sentir muchos beneficios saludables fuera y dentro de su cuerpo.
Calorías
Uno de los impactos más notables que dejar la comida rápida puede tener en su cuerpo es una reducción de peso. Las comidas rápidas son típicamente altas en calorías, con porciones demasiado grandes para mantener una dieta saludable. Al reducir su consumo de comida rápida y reemplazar la comida rápida con comidas más saludables en el hogar, disminuye su consumo total de calorías, lo que ayuda a crear el déficit de calorías necesario para que su cuerpo pierda peso. Combina eliminar la comida rápida de tu dieta con ejercicio para ver resultados aún mejores.
Grasa saturada
Muchas comidas rápidas contienen altos niveles de grasas saturadas, especialmente hamburguesas y alimentos empanados y fritos en aceites que contienen grasas saturadas. Los alimentos ricos en grasas saturadas suelen aumentar el consumo de colesterol malo LDL. A medida que los niveles de colesterol LDL aumentan demasiado en el torrente sanguíneo, el exceso de colesterol puede calcificarse o endurecerse en la placa de colesterol. La placa restringe y obstruye el flujo de sangre a través de los vasos sanguíneos. A medida que sus vasos sanguíneos se obstruyen más, su presión arterial aumenta, junto con sus riesgos de desarrollar enfermedades cardíacas.
sal
Reducir su consumo de comida rápida puede disminuir significativamente su consumo general de sodio o sal. La mayoría de los restaurantes usan en exceso la sal, lo que puede aumentar rápidamente su consumo diario por encima del límite recomendado por la American Heart Association de menos de 1, 500 mg por día. Cuando consume demasiada sal, aumenta el contenido de sal de su sangre. La sal atrae el agua, lo que puede aumentar el volumen de sangre. Cuanto mayor sea su volumen sanguíneo, mayor será su presión arterial. La presión arterial alta con el tiempo daña su sistema cardiovascular, lo que lo pone en mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Reducir la ingesta de sodio al eliminar la comida rápida puede ayudar a reducir estos riesgos.
Azúcar en la sangre
Muchas comidas rápidas tienen ingredientes con alto índice glucémico, como las papas blancas y los bollos hechos de harina blanca procesada. El índice glucémico es una herramienta utilizada para determinar qué impacto tendrá un determinado alimento en el torrente sanguíneo. Los alimentos con alto índice glucémico introducen glucosa en el torrente sanguíneo mucho más rápido que los alimentos con bajo índice, como los granos enteros o la mayoría de las verduras. Cuando la glucosa se introduce demasiado rápido, puede crear un pico y luego colapsar los niveles de azúcar en la sangre. Demasiada glucosa a la vez también es peligrosa para las personas con resistencia a la insulina, como los diabéticos y los prediabéticos.