Si tiene síndrome del intestino irritable, sabe que sus síntomas pueden incluir dolor abdominal. También puede experimentar deposiciones anormales que provocan diarrea o estreñimiento. Aunque el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón informa que entre el 10 y el 15 por ciento de los adultos tienen SII, su causa no se conoce bien. Puede ayudar a controlar los síntomas y posiblemente alargar los períodos de tiempo sin síntomas al administrar cuidadosamente su dieta. La sopa puede ser una buena opción como parte de una dieta de SII, pero es importante elegir los mejores tipos de sopa, evitando aquellos que sean ricos en grasa u otros ingredientes potencialmente agravantes.
Sopa baja en grasa
Fibra y sopa
Los expertos del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh informan que la mayoría de las personas con SII se benefician al aumentar su consumo de fibra dietética, con una cantidad óptima de 20 a 35 gramos diarios. Agregar vegetales con alto contenido de fibra a la sopa puede ayudarlo a alcanzar este objetivo, pero cocine los vegetales con alto contenido de fibra para suavizarlos y que sean más fáciles de digerir. Agregue vegetales de hoja como espinacas o col rizada, junto con zanahorias picadas o apio, cocinando la sopa hasta que las pruebas indiquen que los vegetales están suavizados. También incluya verduras y granos con alto contenido de fibra soluble porque absorbe agua para formar un gel en el estómago, lo que ayuda a aliviar el estreñimiento y la diarrea. Las papas y la cebada son dos buenos ejemplos de alimentos ricos en fibra soluble.
Sopas Ricas en Caldo
Beber muchos líquidos, al menos 8 tazas diarias, es una parte importante de una buena dieta que puede ayudar a prevenir o aliviar los síntomas del SII. Una sopa que contenga mucho caldo de pollo, res o vegetal bajo en grasa o sin grasa puede ayudarlo a lograr este objetivo. Para variar, agregue un poco de pasta integral o arroz integral para aumentar el contenido de fibra y la nutrición del caldo, al tiempo que aumenta la ingesta de líquidos. Evite los caldos muy condimentados o con ajo porque los condimentos como la pimienta o el chile en polvo, así como el ajo, pueden desencadenar síntomas en algunas personas con SII.