Una erupción cutánea por tomates es comúnmente el resultado de una dermatitis alérgica de contacto. La dermatitis alérgica de contacto es una afección cutánea en la que la piel se inflama al entrar en contacto directo con un alérgeno o irritante, como los tomates. Los tomates y otros alimentos altamente ácidos pueden causar dermatitis de contacto. Si nota una erupción cutánea que se desarrolla cada vez que toca o come tomates, debe hablar con su médico. Es posible que tenga alergia a ciertas frutas y verduras.
Dermatitis de contacto alérgica
La dermatitis alérgica de contacto es una inflamación en la piel que provoca hinchazón, enrojecimiento y picazón extrema. Después de entrar en contacto con los tomates, puede desarrollar una erupción cutánea en cuestión de minutos o hasta 48 horas. La erupción puede variar de síntomas leves a severos y puede tomar múltiples exposiciones a los tomates antes de que la erupción sea identificable. Esto se debe a que el cuerpo está construyendo lentamente un anticuerpo para combatir el alergeno del tomate.
Tratamiento
Prueba
La prueba más efectiva para confirmar una alergia a los tomates es una prueba de parche. Un alergólogo colocará un parche en su piel con una pequeña cantidad del alérgeno. Después de dejar el parche en la piel durante un tiempo, el médico lo quitará para observar si la piel forma una erupción.
Evitación
Identificar y evitar la fuente de dermatitis de contacto es el primer paso para tratar la afección. Una vez que le hayan diagnosticado dermatitis de contacto relacionada con los tomates, evite consumirlos. Lea los ingredientes de los alimentos preenvasados y pregunte a su servidor acerca de los ingredientes cuando salga a comer a restaurantes. Use guantes si necesita manipular tomates o plantas de tomate.