El queso ricotta, como el requesón y el queso crema, tiene mucha humedad y se echa a perder más rápidamente que los quesos duros. Úselo rápidamente porque solo se mantiene fresco durante una semana o dos. Si el queso no se ve ni huele como lo hizo cuando lo abrió por primera vez, su mejor curso de acción es tirarlo.
Cosas borrosas azules
Su primera pista de que el queso ricotta se ha deteriorado es un cambio en la apariencia. Aunque algunos tipos de quesos blandos, como el brie o el azul danés, pueden recubrirse intencionalmente con una capa comestible de moho, cualquier moho que crezca en la ricota es una señal de que el queso se ha echado a perder. Puede cortar el moho de los quesos duros y aún comer el queso, pero una vez que el moho aparece en la ricota, tírelo. Algunos mohos producen toxinas dañinas y las esporas de moho probablemente se han infiltrado en todo el recipiente. El queso también puede ser acuoso o tener un aspecto marrón claro o amarillo, en lugar de blanco.
Tomar un olor
A diferencia de muchos quesos que naturalmente tienen un olor pronunciado, el queso ricotta casi no tiene olor. La ricotta es un queso suave y suave que sabe y huele principalmente a leche. Si nota un olor agrio o fermentado, deséchelo.
Duracion
El queso ricotta es altamente perecedero y siempre debe almacenarse cubierto y en el refrigerador a 40 grados Fahrenheit o más fresco. Cuando manipule ricotta, use una cuchara limpia para servir para sacar una porción. Cubra el recipiente y refrigérelo de inmediato. Incluso con este manejo cuidadoso, un paquete abierto de ricotta solo durará una o dos semanas, según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. Para estar seguro, deseche el queso ricotta que ha estado en su refrigerador por más de dos semanas después de abrirlo. Si no recuerda cuándo compró la ricota, deséchela.
Mira la fecha
Todos los paquetes de queso ricotta tienen una fecha de "caducidad". Esta fecha es la última fecha en que el fabricante garantizará la calidad del producto y puede servir como guía para conservar el queso. Tenga en cuenta que un recipiente sin abrir de ricotta puede permanecer fresco durante dos o cuatro semanas, y puede ser bueno para una o dos semanas después de esta fecha. Sin embargo, si la fecha ha pasado y se ha ido, es una apuesta segura que el queso ya no es bueno. En caso de duda, deséchelo.