Leche cultivada y embarazo

Tabla de contenido:

Anonim

Obtener suficiente calcio en su dieta durante el embarazo no solo es importante para los huesos de su bebé sino también para los suyos. Si bien no es seguro para usted beber leche cruda, puede beber leche cultivada rica en calcio, también conocida como suero de leche, siempre que esté pasteurizada. Hable con su médico para obtener ayuda para seguir una dieta segura y saludable durante el embarazo.

¿Qué es la leche cultivada?

Una vez que quedó la leche después de hacer mantequilla, de ahí el nombre de suero de leche. Pero ahora la leche se cultiva agregando la bacteria del ácido láctico Streptococcus lactis a la leche pasteurizada sin grasa o baja en grasa. La bacteria fermenta la leche, haciéndola más ácida, creando un producto lácteo espeso con sabor agrio, que se conoce como suero de mantequilla o suero de mantequilla cultivado.

Nutrición en Leche Cultivada

A pesar de su sabor espeso y cremoso, la leche cultivada es nutricionalmente similar a la leche baja en grasa o sin grasa que se usa para prepararla. Una porción de 1 taza de leche cultivada baja en grasa tiene solo 98 calorías y solo 2 gramos de grasa. También es una buena fuente de proteínas con 8 gramos por taza, que también es un nutriente importante durante el embarazo. La leche cultivada también puede ayudarlo a satisfacer sus necesidades de calcio, con 284 miligramos por porción. Eso es casi el 30 por ciento de sus requerimientos diarios de calcio durante el embarazo.

Usos para la leche cultivada

Si bien puede beber leche cultivada como lo haría con la leche normal, también funciona especialmente bien en alimentos cocinados. Cuando usa leche cultivada como líquido en productos horneados, funciona con bicarbonato de sodio para agregar ligereza, haciendo que sus golosinas sean más tiernas y húmedas. Use la leche en sopas para agregar un poco de sabor y cremosidad. El ácido en la leche también es un buen ablandador de carne. Úselo en su pollo o en un adobo de carne.

Evitar toda la leche cruda

Cuando está embarazada, su sistema inmunológico cambia, lo que la hace más vulnerable a ciertas bacterias, incluidas las que causan enfermedades transmitidas por los alimentos. La leche cruda es una fuente potencial de una serie de bacterias, incluidas Listeria, Salmonella y E. coli. La exposición a estas bacterias durante el embarazo puede ser peligrosa para usted y su bebé, por lo que se recomienda que no consuma leche cruda o productos lácteos crudos, incluida la leche cultivada hecha de leche cruda. Si bien la leche cultivada está hecha con bacterias, es una bacteria amigable, no del tipo que causa daño.

Leche cultivada y embarazo