Los probióticos son bacterias buenas que ayudan a equilibrar las bacterias en el colon y pueden mejorar la salud gastrointestinal en general. Los probióticos se pueden tomar como suplementos y se encuentran naturalmente en ciertos alimentos. Si sigue una dieta libre de lácteos, aún puede tomar probióticos. Si bien los probióticos a menudo se encuentran en alimentos a base de lácteos como el yogur, varias alternativas sin lácteos son igual de efectivas.
Suplementos probióticos sin lácteos
Puede tomar probióticos en varias formas, incluido un conveniente suplemento diario. Para asegurarse de seleccionar solo suplementos probióticos que no contengan lácteos o lactosa, lea cuidadosamente la etiqueta de información nutricional. Las siguientes palabras indican que un producto contiene lactosa o azúcar de la leche: leche, lactosa, suero, cuajada, subproductos lácteos, sólidos de leche en polvo y leche en polvo sin grasa. Si la etiqueta nutricional en su probiótico enumera alguno de los ingredientes anteriores, el producto no es adecuado para una dieta libre de lácteos.
Alimentos sin lácteos que contienen probióticos
También puede incorporar probióticos en su dieta a través de alimentos sin lácteos. El yogur y el kéfir contienen cultivos probióticos vivos, como las bifidobacterias y los lactobacilos, pero las versiones sin leche del yogur y el kéfir hechos de almendras, soja o leche de coco se pueden encontrar en su supermercado local y tienda de alimentos saludables. Kimchi, chucrut, miso, tempeh, pepinillos agrios y pan de masa fermentada son otras fuentes no lácteas de probióticos. Incorporar estos alimentos a su dieta le permite aumentar su consumo de probióticos mientras mantiene una dieta libre de lácteos.
