La sífilis es una enfermedad bien conocida causada por un microorganismo de espiroquetas llamado Treponema pallidum. Si sospecha que está infectado, consulte a su médico lo antes posible y comience su tratamiento en las primeras etapas para evitar posibles consecuencias graves. El tratamiento antibiótico estuvo disponible a mediados del siglo XX. Aunque el número de casos disminuyó desde entonces, la enfermedad aún no se ha erradicado.
Transmisión de la infección.
Puede contraer sífilis a través de un contacto sexual con una persona infectada o de la sangre, ya sea al recibir una transfusión de sangre no probada o mediante agujas compartidas durante la administración de drogas intravenosas. Un bebé puede infectarse durante el parto si la madre tiene sífilis. Desde el sitio de entrada, Treponema se mueve rápidamente a los ganglios linfáticos locales y puede extenderse a todo el cuerpo a través de la sangre. Su sistema inmunitario no puede controlar completamente la infección, incluso si está sano. Sin un tratamiento adecuado, la enfermedad puede seguir progresando lentamente durante muchos años.
Síntomas y etapas de la sífilis
Aproximadamente 3 semanas después del contacto, se desarrolla una úlcera indolora en el sitio de entrada, como el glande del pene en los hombres o la vulva o el cuello uterino en las mujeres. La enfermedad es más infecciosa en este momento. Si no recibe tratamiento, desarrollará síntomas adicionales de 2 a 10 semanas después. Incluyen una erupción de color marrón rojizo, agrandamiento de los ganglios linfáticos y fatiga. En ese momento, Treponema puede encontrarse en la pared de sus arterias y en su cerebro, donde continúa teniendo efectos perjudiciales. Después de un período latente de varios años, puede desarrollar síntomas adicionales, según el órgano que se vea afectado principalmente. La presentación grave de la enfermedad incluye demencia y déficits neurológicos, así como un aneurisma de la aorta que conlleva un alto riesgo de muerte súbita.
Tratamiento de la sífilis
El medicamento de elección para la sífilis es la penicilina G. de benzatina. Si usted es alérgico a las penicilinas, su médico puede recetarle otros antibióticos. Informes recientes también demostraron que incluso una dosis única de azitromicina puede ser suficiente en la etapa temprana de la sífilis y que esta dosis única es tan efectiva como la penicilina G. de uso clásico.
El papel del ajo en el tratamiento
Múltiples culturas han alabado el ajo a lo largo de la historia de la medicina. El ajo contiene sustancias con propiedades antimicrobianas. Esto se mostró por ejemplo para Mycobacterium tuberculosis. El ajo también puede ayudar a eliminar el microorganismo, como se muestra para Pseudomonas aerugionsa. Hasta ahora, los efectos del extracto de ajo en Treponema palidum nunca se han probado, ni in vitro ni in vitro. Dada la gravedad de la enfermedad, es imprescindible diagnosticar si la enfermedad que tiene es sífilis, preferiblemente en la etapa inicial, y tratarla con medicamentos bien probados, como la penicilina o la azitromicina. Si el ajo puede ser beneficioso durante dicho tratamiento tampoco está claro.