Propina
El dolor pectoral puede ocurrir con el uso excesivo o lesiones en los músculos del pecho. En la mayoría de los casos, se puede tratar con éxito con intervenciones conservadoras.
Identificar una condición subyacente
El dolor en el pectoral podría ser un signo de una afección médica subyacente. Los síntomas de un ataque cardíaco podrían confundirse con el dolor muscular pectoral cerca de la axila.
Además del dolor en el pecho, los ataques cardíacos pueden causar dolor que se irradia por los brazos o hacia el cuello y la mandíbula. También puede tener náuseas, falta de aliento y sudoración. Busque atención médica inmediata si tiene estos síntomas.
Distensión muscular pectoral
Las distensiones musculares pectorales varían en gravedad y se clasifican de uno a tres. Las cepas de primer grado implican estirar o microtear algunas fibras de su músculo pec. Aunque es dolorosa, esta lesión leve generalmente no afecta su fuerza.
Las cepas de segundo grado causan lesiones a una mayor cantidad de fibras musculares. Puede notar hinchazón o moretones, junto con debilidad muscular, con este grado de lesión. Según la alerta de salud de Hughston, la mayoría de las distensiones musculares pectorales entran en esta categoría.
Las cepas de tercer grado indican un músculo pec completamente desgarrado. Además del dolor, hematomas e hinchazón, esta lesión puede causar una deformidad visible en el pecho. Incluso podría haber escuchado un "estallido" cuando ocurrió la lesión. Busque atención médica inmediata si sospecha una cepa de grado tres.
Causas Comunes de Lesiones
Según un artículo de 2017 publicado por Medical Journal of Clinical Trials & Case Studies, las rupturas musculares pectorales son poco frecuentes y ocurren con mayor frecuencia mientras se hace ejercicio o se practican deportes. Las distensiones musculares pectorales son más comunes y con frecuencia son causadas por el press de banca.
El músculo pectoral ayuda a levantar el brazo frente al cuerpo, lo cruza y lo rota hacia adentro. Con frecuencia se lesiona en una posición estirada, con el brazo hacia un lado y girado hacia afuera, la misma posición utilizada cuando se presiona en el banco.
Tratar su dolor
El tratamiento del dolor muscular pectoral agudo, inmediatamente después de la lesión durante las primeras 48 a 72 horas, debe incluir remedios caseros, siguiendo el principio de RICE: descanso, hielo, compresión y elevación. Descanse del entrenamiento con pesas en la parte superior del cuerpo o de actividades deportivas que agraven su dolor pectoral hasta que su dolor disminuya.
Aplique hielo a su músculo pectoral durante 10 a 15 minutos a la vez, cada pocas horas durante los primeros dos o tres días después de la lesión. Si bien puede no ser práctico envolver el área de tu pectoral con una venda de compresión, es posible que desees considerar usar una honda para ayudar a soportar el peso de tu brazo lesionado desde el principio.
Evite actividades que aumenten el flujo de sangre al músculo lesionado durante los primeros días después de la lesión; esto puede aumentar el sangrado y la hinchazón, retrasando el proceso de curación. Estas actividades incluyen duchas calientes, masajes, estiramientos o ejercicios del músculo lesionado, aplicaciones de calor tópicas y consumo de alcohol. Después de la fase aguda, se puede aplicar calor para disminuir el dolor.
Mejora tu rango de movimiento
Una vez que su dolor haya desaparecido, el siguiente paso del tratamiento es restaurar el rango de movimiento a los músculos rígidos. Realice estos ejercicios con un palo o taco.
CÓMO HACERLO: Acuéstese boca arriba con un extremo del palo en cada mano. Manteniendo los codos rectos, levante lentamente ambos brazos hacia arriba y sobre su cabeza, lo más lejos posible sin dolor. Sostenga por uno o dos segundos; luego baje lentamente hacia abajo. Repite 10 veces.
Una vez que pueda levantar los brazos por encima de su cabeza, realice este ejercicio en una posición sentada para comenzar a fortalecer su hombro mientras lo levanta contra la gravedad.
Estira tus pectorales
Estira suavemente el pecho para mejorar la flexibilidad. Debería esperarse algo de molestia, pero el dolor significa que se está estirando demasiado. Mantenga cada estiramiento durante 20 a 30 segundos y repita tres veces.
CÓMO HACERLO: Párate derecho y junta las manos detrás de la espalda. Sin inclinarse, levante los brazos de su cuerpo hasta que sienta un estiramiento en el pecho.
Construye tu fuerza
Comience a hacer ejercicios de fortalecimiento con una banda de resistencia una vez que tenga movimiento completo sin dolor. Comience con 10 repeticiones, trabajando hasta tres series seguidas.
CÓMO HACERLO: sostenga un extremo de la banda en cada mano y enróllelo alrededor de los omóplatos. Levante los brazos hasta la altura de los hombros y doble los codos.
Manteniendo los brazos paralelos al suelo, golpee los brazos rectos contra la resistencia de la banda. Sostenga por uno o dos segundos; luego regrese lentamente a la posición inicial.
Prevenir Lesiones Futuras
Una vez que pueda realizar ejercicios de banda fácilmente y sin dolor, reanude lentamente su rutina de entrenamiento regular. Comience con pesas livianas: su fuerza será menor después de una lesión.
Tenga especial cuidado con el press de banca, ya que se sabe que este ejercicio causa lesiones pectorales. Comience manteniendo la parte superior de los brazos paralela al piso para reducir la cantidad de estiramiento en el músculo pectoral en la posición inicial.
Considera la fisioterapia
Si su dolor pectoral no mejora con remedios caseros, consulte a un fisioterapeuta para un programa individualizado. Además, un PT puede usar modalidades como ultrasonido, estimulación eléctrica y láser frío para promover la curación y realizar técnicas manuales para mejorar el rango de movimiento y movilidad.