El ejercicio puede mejorar sus niveles de energía, composición corporal, estados de ánimo y salud general. Sin embargo, si no come adecuadamente, puede perderse estos beneficios. Aunque comer después del ejercicio es "extremadamente importante", según la Extensión de la Universidad Estatal de Iowa, su dieta general juega el papel más importante en su bienestar y éxito en el entrenamiento. Una dieta ideal contiene una variedad de alimentos nutritivos y cantidades suficientes de calorías. Para obtener los mejores resultados, busque orientación de su médico o dietista antes de cambiar su dieta.
Función
Su comida posterior al ejercicio determina su nivel de energía y recuperación para los próximos entrenamientos, según ISUE. Durante el ejercicio, su cuerpo usa glucógeno, que es la energía almacenada en sus músculos. Comer poco después repone el glucógeno, promueve la recuperación adecuada y reduce el riesgo de fatiga. También reduce el riesgo de deshidratación y bajo nivel de azúcar en la sangre, o hipoglucemia.
Alimentos óptimos
Dentro de las dos horas de su sesión de ejercicio, coma una comida o merienda que contenga carbohidratos y proteínas. Las valiosas opciones de bocadillos incluyen un sándwich de mantequilla de maní o carne magra; yogurt y fruta; frutos secos con nueces; y galletas con queso. También puede optar por una comida balanceada que contenga almidón, como arroz integral, pan integral o una papa; un alimento rico en proteínas, como leche baja en grasa, pescado o tofu; y verduras frescas o cocidas.
Fluidos
Reponer líquidos perdidos debe ser su primera prioridad después del ejercicio, según ISUE. Puede lograr esto bebiendo agua, jugo puro de frutas o vegetales, un licuado o una bebida deportiva. Las bebidas deportivas, que contienen electrolitos, minerales que juegan un papel importante en la función muscular y cardíaca, pueden ser útiles después de largos entrenamientos; hacer ejercicio por más de 60 minutos aumenta su riesgo de desequilibrios electrolíticos. Y los carbohidratos en las bebidas deportivas pueden ayudar a reponer el glucógeno perdido. Como regla general, beba de 2 a 3 tazas de líquido después de su entrenamiento.
Sincronización
Según los Servicios de Salud de la Universidad de Columbia, comer alimentos y bebidas ricos en carbohidratos, como frutas, jugos y panes, 15 a 60 minutos después del ejercicio es el momento ideal. Esto es cuando las enzimas que producen glucógeno son las más activas, lo que puede conducir al agotamiento si no se recarga con alimentos. Coma alimentos ricos en proteínas y carbohidratos dentro de las dos horas de su entrenamiento.