El jengibre no solo es un aditivo sabroso para cocinar y hornear, sino que también puede mejorar la salud. En la medicina china, el jengibre se usa para tratar una serie de afecciones, desde náuseas y congestión hasta el tratamiento y prevención del cáncer. Las personas que sufren problemas de tiroides pueden encontrar que los compuestos en el jengibre tienen un efecto positivo en la función tiroidea.
Salud de la tiroides
La tiroides produce dos hormonas diferentes que viajan a través de la sangre a todas las partes del cuerpo: triyodotironina y tiroxina. Estas hormonas regulan el metabolismo del cuerpo y le dicen a los órganos qué tan lento o rápido deben funcionar. La glándula pituitaria controla cómo funciona la tiroides. Cuando la tiroides produce un nivel hormonal demasiado alto, se llama hipertiroidismo, que causa un metabolismo más rápido. Cuando se produce un nivel hormonal demasiado bajo, se llama hipotiroidismo, donde el metabolismo del cuerpo se ralentiza. La inflamación crónica en el cuerpo puede dañar la tiroides, y la inflamación está asociada con enfermedades de la tiroides, como la tiroiditis.
Nutrientes en Jengibre
Según la Enciclopedia Whole Foods, el jengibre tiene muchos nutrientes clave que ayudan al cuerpo a funcionar. El jengibre contiene magnesio, que se ha demostrado que es crítico para controlar la enfermedad de la tiroides. El magnesio ayuda con la relajación muscular y previene el desarrollo de latidos cardíacos irregulares. El jengibre también contiene potasio, un mineral esencial para regular los fluidos en el cuerpo. Otros nutrientes incluyen vitamina B-6, cobre y manganeso, así como el compuesto antioxidante gingerol. Debido a que ayuda a regular la inflamación, el jengibre también podría proteger contra los trastornos tiroideos relacionados con la inflamación. Sin embargo, se necesita más investigación para saber qué tan bien funciona.
Cómo usar jengibre
El jengibre se puede usar de diferentes maneras. La raíz de jengibre fresca pelada y cortada en cubitos se puede agregar a sopas y platos salteados. La raíz también puede remojarse en agua caliente o agregarse al té. El jengibre en su forma de polvo puede usarse en productos horneados como galletas y muffins. El jengibre tiene un sabor fragante y picante, e incluso puedes encontrarlo seco y endulzado en las tiendas de alimentos naturales. El jengibre seco se puede comer como está.
Efectos secundarios y precauciones
Las personas que padecen trastornos de la tiroides deben consultar con su médico antes de incorporar el jengibre o cualquier hierba en su plan de tratamiento. Esto se debe a que las hierbas pueden interactuar con medicinas tradicionales, suplementos u otras hierbas. Aunque es raro, algunas personas pueden tener sensibilidad al jengibre, lo que resulta en efectos secundarios que incluyen acidez estomacal leve e irritación en la boca. Según el Centro Natural de Medicina Complementaria y Alternativa, las personas con trastornos hemorrágicos o las que toman anticoagulantes no deben agregar jengibre a su dieta.