Los descongestionantes se usan para reducir la congestión nasal o la congestión causada por alergias, el resfriado común u otras infecciones. La congestión nasal ocurre debido a la hinchazón de los tejidos que recubren la nariz o la acumulación de secreciones dentro de la nariz. Los descongestionantes reducen la congestión al actuar directamente sobre los vasos sanguíneos en el revestimiento nasal, haciendo que los vasos se vuelvan más estrechos. Esto reduce la hinchazón de los tejidos del revestimiento. Pero los descongestionantes también pueden afectar los vasos sanguíneos fuera de la nariz. Cuando los vasos sanguíneos se estrechan en otras partes del cuerpo, la presión arterial puede aumentar. Si bien el aumento generalmente es pequeño, puede ser especialmente importante en personas que ya tienen presión arterial alta. Todos los descongestionantes pueden aumentar potencialmente la presión arterial, pero es menos probable con aerosoles o gotas nasales que con los descongestionantes orales. El tratamiento de la congestión nasal por métodos naturales o medicamentos que no contienen descongestionantes son las mejores formas de evitar cualquier efecto de los descongestionantes en la presión arterial.
Descongestionantes orales versus nasales
Cuando los descongestionantes se toman por vía oral como píldoras o líquidos, primero se absorben del intestino al torrente sanguíneo. A medida que viajan a través de la sangre, los descongestionantes ingresan a los vasos sanguíneos de todo el cuerpo, lo que hace que los vasos se estrechen y la presión arterial aumente. La pseudoefedrina (Silfedrin, Sudafed) y la fenilefrina (Sudafed PE) son ejemplos de descongestionantes orales.
Cuando los descongestionantes se usan como aerosoles o gotas nasales, actúan principalmente en la nariz. Una pequeña cantidad de descongestionante será absorbida desde la nariz hacia el torrente sanguíneo, pero la cantidad que llega a otras áreas del cuerpo es mucho menor que con los descongestionantes orales. La oximetazolina (Afrin, Dristan), fenilefrina (Neosinefrina), nafazolina (Privine) y propilhexedrina (Benzedrex) son descongestionantes nasales. El riesgo de aumento de la presión arterial puede ser menor con propilhexedrina que con los primeros 3 medicamentos.
Medicamentos no descongestionantes
Los medicamentos que contienen antihistamínicos se usan comúnmente como alternativas a los descongestionantes. La histamina aumenta las secreciones nasales, especialmente en personas con alergias. Al bloquear la acción de la histamina, los antihistamínicos pueden reducir las secreciones y disminuir la congestión nasal. Los antihistamínicos comunes de venta libre incluyen clorfeniramina (Chlor-Trimeton), loratadina (Claritin) y cetirizina (Zyrtec). Coricidin HBP y Nyquil HBP son líneas de productos de medicamentos combinados para el resfriado y la gripe comercializados específicamente para personas con hipertensión. Ambos contienen antihistamínicos pero no descongestionantes.
Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno (Advil, Motrin) o el naproxeno (Aleve), reducen la inflamación y las secreciones en la nariz. Estas propiedades los hacen útiles para la congestión nasal. Los aerosoles nasales que contienen corticosteroides, como la fluticasona de venta libre (Flonase) o la triamcinolona (Nasacort), también pueden reducir la inflamación en la nariz. Se usan más comúnmente para la congestión nasal debido a alergias.
Alternativas naturales
Una serie de medidas naturales pueden ayudar a reducir la congestión nasal. La inhalación de vapor de un vaporizador, un recipiente con agua caliente o una ducha caliente pueden ayudar a humedecer el revestimiento de la nariz para que cualquier secreción presente se vuelva más acuosa y más fácil de eliminar. El aumento de la ingesta de líquidos también puede producir secreciones nasales que son menos espesas y más acuosas. Algunas personas encuentran que los líquidos calientes o picantes son particularmente útiles. Las gotas nasales salinas o los aerosoles nasales están hechos de agua salada que puede diluir las secreciones y posiblemente reducir la inflamación del revestimiento nasal. Las tiras nasales (Breathe Right) son otra alternativa, ya que abren ligeramente las fosas nasales para reducir la congestión nasal.
Advertencias y precauciones
La American Heart Association recomienda que siempre lea las etiquetas de cualquier medicamento de venta libre si tiene presión arterial alta, incluso si su presión se controla con medicamentos. Las etiquetas de la mayoría de los medicamentos que contienen descongestionantes incluyen una advertencia requerida por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para consultar con un médico antes de usar el medicamento si tiene presión arterial alta. La FDA no requiere esta advertencia en la etiqueta de propilhexedrina nasal, pero la información del fabricante indica que el medicamento debe usarse con precaución en personas con presión arterial alta. Si su médico le permite usar un descongestionante, asegúrese de seguir las instrucciones exactamente y no usar más de la dosis recomendada.
Revisado por: Mary D. Daley, MD