Caminar es un buen ejercicio que casi cualquier persona puede hacer. Incluso las personas con sobrepeso o aquellas que están seriamente fuera de condición pueden caminar al menos un poco. Caminar ayuda a perder peso, mejora la condición cardiovascular y desarrolla o tonifica los músculos. Caminar en una cinta de correr puede ser tan bueno como caminar al aire libre y es algo que se puede hacer durante todo el año sin interferencia del clima. Todos los gimnasios, gimnasios y muchos hogares ahora tienen cintas de correr.
Caminar normalmente
Incluso cuando empiece a caminar en una cinta de correr, ajuste la inclinación a un nivel ligeramente superior al plano, para compensar la falta de resistencia al viento. Camine normalmente pero sostenga los pasamanos si la estabilidad es un problema. Acérquese a caminar sin aferrarse, ya que los movimientos del brazo harán que caminar sea más normal y mejorarán el beneficio cardiovascular. Camine lentamente hasta que se adapte a la banda de rodadura en movimiento; luego aumente gradualmente su velocidad. La marcha normal en una superficie relativamente plana apuntará a todos los músculos de las piernas y el trasero. Tonificar con este ejercicio dependerá de cuántas veces a la semana y cuánto tiempo camine. Un horario sugerido es de cinco a siete días a la semana a una velocidad mínima de 3.0 por más de 30 minutos.
Cambiar inclinación
Aumente la inclinación para obtener el máximo beneficio para sus cuádriceps y su trasero. La acción de intensificar trabajará más esos músculos, ayudando a que las piernas y los glúteos sean más firmes. Es mejor variar la inclinación. Comience lentamente con un nivel bajo y aumente gradualmente. Camine a la altura máxima solo por períodos cortos para permitir que los músculos se recuperen con una pendiente más gradual.
Variar velocidad y zancada
Varíe la velocidad para que sus músculos no se adapten a un solo ritmo. Haga ejercicio a un ritmo cómodo y "normal" al que pueda caminar fácilmente. Use eso como su base y varíe la intensidad hacia arriba y hacia abajo desde ese nivel base. Alargue los pasos cuando aumente la inclinación y los acorte cuando vuelva a bajar. Concéntrese en su caminar para tonificar al máximo; enfóquese en su paso en lugar de una pantalla de televisión.
Caminar hacia atrás
Camine hacia atrás a intervalos, por períodos cortos, para simular una caminata cuesta abajo que trabaje la parte posterior de sus piernas, isquiotibiales y pantorrillas. Intenta dar un paso lateral a veces, si puedes hacerlo cómodamente, para trabajar el interior de tus piernas. No hagas el mismo ejercicio todos los días; haga un plan que requiera caminatas largas y lentas un día y caminatas más cortas e intensas al día siguiente.