La cantidad de agua que bebe en un día puede afectar la salud de sus articulaciones. Hay muchas razones por las cuales sus articulaciones pueden doler. Podría tener artritis, deshidratación crónica, gota o gripe. Es posible que aumentar la ingesta de agua no cure completamente el dolor en las articulaciones, pero puede ayudar a su cuerpo a manejar los problemas subyacentes que le causan dolor.
Función
Sus articulaciones son como bisagras donde se unen dos huesos. Los ligamentos conectan los huesos entre sí y una capa de cartílago cubre la superficie del hueso para evitar que los dos huesos se froten directamente uno contra el otro. Un líquido especial llamado líquido sinovial llena el espacio entre los huesos y proporciona alimento a la articulación y al cartílago. Una articulación sana y bien nutrida puede moverse sin dolor, pero a veces el estrés crónico, una lesión o una acumulación de cristales ácidos en las articulaciones pueden causar dolor.
Hidratación
Mantenerse adecuadamente hidratado durante todo el día le da a su cuerpo varias ventajas. El agua lo ayuda a mantener un volumen sanguíneo adecuado para que los nutrientes puedan moverse a través de la sangre y hacia las articulaciones. Si piensa en sus articulaciones como una esponja, imagine cuán fácilmente se pueden mover dos esponjas húmedas una contra otra que dos esponjas duras y secas. El agua también permite que los productos de desecho salgan de las articulaciones. Además de tomar medicamentos recetados por el médico, las personas que sufren de dolor de gota deben beber al menos seis a ocho vasos de agua todos los días.
Deshidración
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Missouri explica que la deshidratación crónica puede provocar sed, estreñimiento, dolor frecuente en las articulaciones, dolor de estómago, poca energía y confusión. Desafortunadamente, la capacidad de su cuerpo para sentir la sed podría estar rezagada con respecto a su necesidad de agua. La mejor manera de prevenir la deshidratación es hacer un esfuerzo consciente para mantenerse hidratado durante todo el día. Beba mucha agua antes de cualquier ejercicio, para que su cuerpo tenga un poco de líquido de reserva que pueda usar para refrescarse.
Cantidad
La Junta de Alimentos y Nutrición recomienda que las mujeres beban 91 onzas de agua diariamente y los hombres beban 125. Según el Consejo Americano de Ejercicio, una buena forma de controlar su nivel de hidratación es vigilar su orina, que debe ser "abundante y de color amarillo pálido." Si toma suplementos, verá un color más oscuro durante unas horas después, pero aún así debería estar produciendo una buena cantidad. Tómese el ritmo cuando beba porque tomar grandes cantidades de agua de una sola vez puede alterar el equilibrio de sodio de su cuerpo y dejarlo aturdido y confundido durante un par de horas.