Las personas que hacen dieta a menudo comen mucha lechuga porque te llena y proporciona nutrientes esenciales, como ácido fólico y vitaminas A y K, sin proporcionar muchas calorías. Del mismo modo, otras verduras sin almidón, incluida la lechuga, pueden ser una buena opción para los diabéticos debido a su bajo contenido de carbohidratos y sus efectos mínimos sobre los niveles de azúcar en la sangre.
Riesgo de lechuga y diabetes
Un estudio publicado en "Diabetes Care" en diciembre de 2004 encontró que las personas que comían más vegetales de hoja verde, como la lechuga, tenían menos probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 que las personas que no comían estos vegetales con frecuencia. Las legumbres, las verduras y las frutas de color amarillo oscuro también se asociaron con una disminución del riesgo de diabetes.
Lechuga y azúcar en la sangre
El índice glucémico estima el efecto de un alimento en sus niveles de azúcar en la sangre, y los alimentos con un puntaje bajo tienen menos probabilidades de causar picos en los niveles de azúcar en la sangre que aquellos con un puntaje alto. La lechuga y la mayoría de las demás verduras sin almidón tienen puntajes de índice glucémico muy bajos, según la Asociación Americana de Diabetes, por lo que no tiene que preocuparse de que aumenten en gran medida sus niveles de azúcar en la sangre.
Contenido de carbohidratos de lechuga
Una taza de lechuga solo contiene alrededor de 5 a 10 calorías y 1 a 2 gramos de carbohidratos, según el tipo. Al contar los carbohidratos, una porción de vegetales se considera 5 gramos de carbohidratos, que no alcanzaría a menos que comiera más de 2 tazas de lechuga. Es por eso que la Asociación Americana de Diabetes (American Diabetes Association) dice que no necesita contar los carbohidratos en vegetales sin almidón como la lechuga, a menos que coma más de 2 tazas de vegetales crudos o 1 taza de cocidos.
Recomendaciones de consumo
La Asociación Americana de Diabetes recomienda que los diabéticos coman al menos tres a cinco porciones de vegetales sin almidón cada día. Elegir un tipo de lechuga de color más oscuro, como la lechuga romana o de hoja verde, es mejor que optar por una lechuga de color más claro, como el iceberg, porque estas lechugas más oscuras son más altas en micronutrientes esenciales.